El rector de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), Franco Bartolacci, fue uno de los oradores de la marcha federal universitaria de la ciudad de Buenos Aires frente al Congreso, donde los diputados rechazaron el veto del presidente Javier Milei a la ley de financiamiento universitario.
Los legisladores insistieron con la ley con 174 votos a favor de rechazar el veto y 67 en contra. El tema ahora pasó al Senado, donde se descuenta que también conseguirá la mayoría calificada por la holgura con la que salió en votación original.
El rector rosarino, que además es vicepresidente del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), se mostró eufórico ante el resultado de la votación de este miércoles y dio un discurso ante la multitud que aguardaba la decisión de los legisladores.
“Aguante la universidad pública argentina, aguante el Garrahan, aguanten las causas justas, aguante la gente noble y buena de este país que otra vez puso las cosas en su justo lugar para poder contar la Argentina que queremos”, comenzó diciendo Bartolacci.
Luego reconoció la emoción del momento de la votación aunque aún quede por esperar el tratamiento en el Senado.
“Nos explota el corazón de emoción a la comunidad universitaria y científica del país, que tuvo que soportar el destrato, la desconsideración, el ninguneo y que sin embargo, en esas condiciones tremendamente precarias, siguió haciendo todo lo que había que hacer para sostener lo que sucede en nuestras universidades, conscientes de su compromiso y su rol histórico”, indicó el rector de la UNR.
El rector rosarino remarcó además la diversidad de la marcha federal de este miércoles y del reclamo universitario de los últimos meses. “Esa es nuestra mayor riqueza. Con esa diversidad, con tantos que somos, somos antes conscientes de qué es lo que nos une y qué es lo que hay que cuidar”, agregó.
Qué dice la ley
La ley de Financiamiento de la Educación Universitaria, busca garantizar la protección, sostenimiento y ampliación de los recursos destinados a las universidades públicas de todo el país.
Establece una asignación específica y automática de fondos, fija metas de incremento progresivo del presupuesto universitario hasta alcanzar el 1,5% del PBI en 2031 y crea un fondo especial para el desarrollo de carreras estratégicas.
La iniciativa también contempla convocatorias regulares a paritarias para recomponer los salarios docentes y no docentes, y refuerza el sostenimiento de programas de becas y bienestar estudiantil con el objetivo de garantizar el acceso, la permanencia y la graduación como parte del derecho universal a la educación superior y del reconocimiento de la universidad como bien público.