Farmacias de la ciudad están lidiando con complicaciones para reponer medicamentos que se venden a través de convenios con obras sociales y prepagas por demoras en los pagos que, sostienen, les impiden reponer los remedios sin perder rentabilidad.

Claudia Varela, secretaria de la Mesa Directiva del Colegio de Farmacéuticos de Rosario, explicó que en el sector están atravesando "una situación muy compleja". "Nosotros tenemos convenios con obras sociales en los que se pactan descuentos y el pago de los medicamentos a los 30 días", dijo, y precisó que "en un contexto normal" esa situación no genera mayores problemas.

Al respecto, Varela precisó que ese plazo actualmente es más extenso que el establecido por convenio: "Un medicamento que entregamos hoy lo estamos pagando a la droguería a los 15 o 20 días, y el pago de la obra social lo recibimos a los 40 o 65 días", dijo este miércoles en diálogo con El Contestador (Radio 2).

Esa diferencia entre el plazo en el que pagan los medicamentos y el tiempo que demora en hacerse efectivo el pago de las obras sociales va "en desmedro de la viabilidad de la farmacia" y les impide reponer la mercadería, agregó la presidenta del Colegio de Farmacéuticos. La aceleración inflacionaria de los últimos meses y la incertidumbre económica que esto genera fue determinante para agravar el panorama.

Además, comentó que "los principales clientes de farmacias son afiliados de Pami, que tienen un precio diferencial y", por lo tanto, generan "una pérdida mayor" para los locales de venta. "El 80% de los clientes tiene algún tipo de cobertura", añadió para manifestar que el problema puede afectar a la mayor parte de quienes necesitan comprar remedios.

"No depende del farmacéutico si no puede reponer lo que vendió días atrás, y por esto estamos hablando con los financiadores para poder ajustar estos convenios", concluyó Varela.

"La provisión de medicamentos es normal"


 

A raíz de esta situación, que comenzó a difundirse durante los últimos días, desde el Centro de Profesionales Farmacéuticos Argentinos (Ceprofar) afirmaron que la provisión de medicamentos "es normal" y que actualmente "no hay faltantes" de remedios ni cambios en las condiciones de pago.

Con respecto al conflicto vigente con las empresas de medicina prepaga, indicaron que se debe a "las condiciones contractuales que exigen a las farmacias".

"Para tranquilidad de la población, la provisión de medicamentos es normal, a través de las droguerías y laboratorios, manteniéndose las condiciones de pago habituales, sin que haya faltantes de medicamentos", subrayó el Ceprofar en un comunicado.

Asimismo, remarcó que "la situación de conflicto se centra en la atención a las prepagas, no así en la mayoría de las obras sociales".

En este sentido, la entidad precisó que en Argentina, alrededor del 5% de la población –más de dos millones de personas– reciben sus medicamentos a través de la medicina prepaga, mientras que el 63% –28 millones de personas– recibe la atención a través de las obras sociales.

Apuntan que el conflicto "se debe a las condiciones contractuales que exigen a las farmacias las empresas de medicina prepaga". (Ana Isla/Rosario3)

A su vez, recalcó que "no hay problemas en la atención al Pami, que está abonando las prestaciones en tiempo y forma a las farmacias, de acuerdo a lo convenido".

También reconocieron que se trata de "un conflicto que viene desde tiempo atrás, y se debe a las condiciones contractuales que exigen a las farmacias las empresas de medicina prepaga".

Recordaron que las empresas de medicina prepaga tienen "convenios particulares" con las farmacias y que estos "se realizan en forma directa entre las partes, sin que intervengan entidades farmacéuticas ni el Estado".

"A estos convenios no acceden todas las farmacias en forma libre, sino sólo las farmacias que las prepagas aceptan como prestadoras", ahondó la agrupación.

En tanto, continúa el comunicado, en los convenios las prepagas exigen a las farmacias prestadoras condiciones que son de "difícil cumplimiento": se obliga a un aporte –en carácter de "bonificación"– que puede llegar hasta el 25%, mientras que la rentabilidad total bruta del sector farmacia ronda el 30%.

"El problema se agrava porque las prepagas pagan las prestaciones a las farmacias en un término promedio de 60 días, no adecuándose a los plazos de pago", advirtió.