La comisión investigadora sobre el fentanilo contaminado de la Cámara de Diputados había convocado para este jueves al ministro de salud, Mario Lugones, para que diera explicaciones sobre la cadena de controles y los procedimientos que debió llevar adelante el Estado nacional en salvaguarda de la salud de los ciudadanos. El funcionario pegó el faltazo, tal como lo había hecho cuando fue llamado por las supuestas coimas en Discapacidad.
"No vinieron, faltándole el respeto a los familiares de las víctimas y mostrando su falta de compromiso con la investigación", explicó el diputado nacional por Santa Fe, Eduardo Tonioli.
También estaban invitados a la cita la titular de la Administración Nacional de Medicamentos (ANMAT), Agustina Bisio; Gastón Morán, director del instituto nacional de medicamentos (Iname), y Juan Crlos Fernández, uno de los jefes en la Dirección de Evaluación y Registro de Medicamentos de la Anmat: "No vino ninguno", expresó la diputada por la UCR Mariela Coletta.
Además de diputados, en la comisión participan familiares de las víctimas, quienes reclaman respuestas y mayor compromiso del Estado frente a la crisis sanitaria que provocó el uso ilegal de la sustancia.
"Son unos truchos los funcionarios que no dan la cara, hay que traerlos de los pelos. Tiene que venir Lugones a dar la cara", dijo el legislador radical Pablo Juliano.
Creada por unanimidad y con autoridades representativas de las distintas fuerzas políticas de la Cámara de Diputados, la Comisión Investigadora sigue su marcha hacia el 9 de diciembre, cuando se espera la difusión del informe final.
El grupo, presidido por la exintendenta rosarina Mónica Fein, escuchó testimonios de personas afectadas por la sustancia, y de familiares de víctimas que ascienden a 124 y algunos medios ubican en 160. Además, hubo una reunión con Ernesto Kreplak el juez federal que investiga la causa.
La comisión tiene como vicepresidenta a Silvana Giudici (ex PRO, actual LLA) y Victoria Tolosa Paz (UxP). Por allí pasaron referentes de diferentes organismos sanitarios, incluidas las autoridades del Hospital Italiano de La Plata, el primero en dar alerta sobre las ampollas adulteradas provenientes del laboratorio HLB Pharma.