El incendio en la fábrica de corchos de Viamonte y Corrientes, en el macrocentro de Rosario, implicó un intenso despliegue de distintas dotaciones de bomberos hasta pasada la medianoche del martes y continuaba este miércoles con una "guardia de cenizas".

Aníbal Gómez, jefe de los bomberos voluntarios de la ciudad, explicó en Radiópolis (Radio 2) que "la destrucción fue total por la magnitud y la característica del siniestro".

Mencionó que hubo un "colapso completo del techo y eso dificultó la tarea de bomberos: estuvimos más de diez horas, empezamos al mediodía y la última dotación se fue a las 0.30; fueron más de 50 bomberos trabajando en doce dotaciones de gran porte".

Gómez señaló que el material de la fábrica complicó todo: "El corcho hecho aserrín, polvillo, para hacer la pasta, sumado a que colapsó todo el techo fue que lo dificultó la tarea y llevó tantas horas; si bien no estaba en llama viva sí había material incandescente".

Alan Monzón/Rosario3

Por esa complejidad hubo dos grupos de trabajo: "Uno de ataque al siniestro y otro con prioridad en que no avance el fuego a ninguna casa lindera y por suerte esa tarea fue altamente positiva y lo tuvimos siempre controlado en el predio".

Este miércoles a la mañana persistían sobre Viamonte dos dotaciones de bomberos para sostener el trabajo de enfriamiento y por prevención.

El titular de los voluntarios calificó esas tareas como una "guardia de cenizas que se hace con incendios de gran magnitud" y que en este caso se explica porque se trata de una fábrica de corchos con materia prima a granel.

Alan Monzón/Rosario3

Ese polvillo o aserrín de corcho puede generar "focos más chicos que puedan extenderse", advirtió Gómez.

Eso mismo advirtieron los bomberos al móvil de Cada Día (El Tres) este miércoles y pidieron desalojar la zona por posibles derrumbes. Los propietarios del lugar también recorrieron las instalaciones y contaron que la fábrica tiene 19 años de historia en el lugar. La zona seguía cortada al tránsito.