Este miércoles comenzó el juicio contra el empresario gastronómico Claudio Contardi, exmarido de Julieta Prandi, acusado de haber abusado sexualmente de la modelo durante al menos tres años y de causarle un grave daño mental. El juicio se lleva a cabo en el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N° 2 de Campana.
Julieta Prandi es representada por Javier Baños, del equipo de abogados de Fernando Burlando. Era la primera testigo en declarar y deberá revivir ante el Tribunal todos los hechos denunciados.
"Estoy aliviada y angustiada, pero con la necesidad de hablar. Es el fin de un calvario. Es horrible pero muy necesario. Se esperó mucho tiempo para que llegara este momento y finalmente la Justicia escuche, que dé lugar y haga justicia", expresó Prandi.
En diálogo con la prensa antes de ingresar a la sala, indicó: "Es espantoso tener que contar todo y siento que es inabarcable, son muchos años", sostuvo.
Contardi está acusado de "abuso sexual con acceso carnal agravado por causar un grave daño en la salud mental de la víctima, con una serie de hechos reiterados".
El empresario llega al juicio en total libertad. La defensa de Prandi había solicitado la prisión domiciliaria y el uso de la tobillera electrónica, pero ambas medidas fueron rechazadas. Sí cae sobre el acusado una medida perimetral de 300 metros por los cuales no puede acercarse a la modelo.
Por su parte, los abogados de Contardi habían solicitado su sobreseimiento y luego que se realice un juicio por jurados. Ambas instancias fueron rechazadas por el juez Luciano Marino.
Incluso, minutos antes del inicio del juicio, la defensa realizó un pedido de nulidad del proceso judicial. Al ser consultada al respecto, Prandi respondió: "No me sorprende nada, de esa persona, si se la puede llamar persona, espero cualquier cosa".
La modelo, que tuvo que realizar tratamientos con psicólogos y psiquiatras por las secuelas por lo vivido, adelantó que pedirá medidas de seguridad para su familia y para su propia persona: “Temo por mi seguridad, por supuesto, me fui de mi casa amenazada de muerte. Pasé años de violencia psicológica, física, verbal y sexual”, declaró Prandi.
En ese sentido, resaltó la importancia de la contención de sus allegados al comienzo del juicio. “Estoy fuerte y lista, lo que no quiere decir que no esté rota, porque a mí ya me rompieron. Pero no por eso no voy a buscar y encontrar justicia”, aseguró.
“Ojalá hallen el camino para que deje de haber tantos pasos para que una víctima pueda contar su historia y recibir justicia. Es demasiado lo que tenemos que soportar. La espera, la revictimización, volver a contar una y otra vez, pasar por pericias, mientras que el victimario tiene el derecho a no declarar”, expuso Julieta Prandi. Contardi no se realizó ninguna pericia.
Y agregó: "Las mujeres no se atreven a denunciar porque muchas veces en la misma comisaría te mandan de vuelta a tu casa. Saben que no reciben respuesta. Eso me pasó. He visto mujeres que le decían «ya está, ya se le pasó la borrachera a tu marido, volvé a tu casa» y la volvían a cag... a trompadas. Las mujeres tenemos todas las de perder. A las que nos matan es a nosotras".