Isabella Taylor crea vestidos con piel de salmón y dice que la sustentabilidad es su principal prioridad. La joven británica visita pescaderías y ahumaderos para recolectar piel que de otro modo se desecharía para crear sus diseños poco convencionales.
"La sostenibilidad es lo único que me importa; la única razón por la que estoy en la moda es para ayudar a ser sostenible. "Si no es sostenible entonces no me siento bien con ello: aumenta la belleza de la moda", dijo Taylor a South West News Service, según publicó el diario estadounidense New York Post.
La joven diseñadora crea su "tela" de pescado limpiando la piel de cada pieza. Posteriormente, descama cada pescado, broncea el material y lo tiñe. Una vez hecho eso explicó que coloca el material sobre una estructura para moldearlo mientras se seca. Cuando termina, con las pieles "ya no huelen feo y duran mucho".
"Hay tantas prendas hermosas en el mundo, pero si sabes que todas están hechas con telas nuevas, ya no es hermoso", explicó
Taylor se interesó por primera vez en la vida marina cuando era niña. Hizo snorkel durante sus vacaciones y tomó fotografías de peces. La británica, que tiene una gemela idéntica, dijo que quería hacer algo original para diferenciarse: "Al ser idéntica en apariencia a mi hermana Alice, quería una manera de expresar mi singularidad".
Antes de diseñar ropa con peces, Taylor pintaba las criaturas: "Empecé a pintar peces muertos y se convirtió en mi nicho: es más fácil pintar algo que no se mueve, así que solía usar imágenes del mostrador de pescado de los supermercados", añadió.
Si bien disfrutaba pintando, la joven quería involucrar a más personas en su proceso artístico y pasó al diseño. "La moda es el arte que ves día a día y se relaciona con una persona específica en lugar de estar en una pared", explicó la fashionista amante de los peces. "La moda puede comunicar emociones y para mí era más emocionante que pintar", declaró además.
Taylor crea principalmente alta costura estructural y atribuye a las pieles de pescado el mérito de darle la capacidad de experimentar. "Me encanta jugar con las propiedades específicas de la piel de pescado que no se encuentran en otras telas y esto es lo que estoy usando como factor impulsor de mi trabajo", contó.
"Son piezas muy escultóricas que apenas pesan. No desgasta la tela ni cae al suelo. La forma en que las prendas pueden ser tan ligeras significa que puedes crear estas piezas de alta costura surrealistas fácilmente".