Un arquero falleció en un accidente de moto en la localidad tucumana de Amaicha del Valle y sus compañeros lo despidieron de una forma muy particular.

El hecho que desencadenó la muerte de Inti Castillo ocurrió el domingo 31 de octubre a las 21.30, cuando andaba en su moto Yamaha YBR de 125 cc. por las cercanías de ex Cabramarca, en el ingreso norte de Santa María. Según la información policial, Castillo circulaba acompañado de una mujer de 31 años y de un niño de 5 años de edad. El rodado embistió a un caballo.

Sus compañeros del equipo San Ramón de Los Zazos (que milita en la Liga Santamariana), donde el joven jugaba como arquero, decidieron tener un último encuentro en la cancha, en ese lugar donde compartieron tantas emociones. Así fue que junto a familiares e hinchas, con bombos y platillos, acompañaron los restos del joven hasta el lugar, colocaron el cajón en la línea del arco y le patearon los últimos penales. 

La imagen, emotiva para muchos, irrespetuosa para otros, se viralizó rápidamente y dio lugar a un sin fin de comentarios a favor y en contra. 

El Instituto de Estudios Superiores de Santa María también recordó al joven con una publicación en redes sociales. El texto ilustraba que fue abanderado, que se había egresado como profesor de Matemáticas y que en su paso por el establecimiento había dejado “una huella”.

Pero el club de sus amores, el San Ramón Los Zazos, fue el escenario privilegiado del ritual. En otro mensaje de despedida, la cuenta oficial de la institución expresó que van a recordar a Inti “en cada partido y en cada cancha” que juegue el equipo.