Un hombre de 33 años aceptó una suspensión de juicio a prueba por haber roto los vidrios de la puerta delantera de un colectivo de una patada, en reclamo de que el chofer no lo había dejado subir por ir lleno. La audiencia se realizó este lunes y, de acuerdo a la resolución del juez Ismael Manfrin, deberá realizar una donación a la Fundación del hospital de Niños Víctor J. Vilela y dar una reparación económica a la empresa de transporte.
La probation, acordada entre la fiscal Silvana Valero y el defensor particular Rodrigo Navas, se concretó como consecuencia del episodio que tuvo lugar el 9 de mayo pasado a las 13.40 en Provincias Unidas y Eva Perón, en la zona noroeste, cuando Andrés F. discutió con el conductor de una unidad de la línea 33/9 porque le había dicho que no podía ascender porque había muchos pasajeros.
Andrés F., según la causa, se puso delante del colectivo impidiendo su avance, insultó al colectivero y después dañó la puerta delantera, hecho por el que terminó detenido en la comisaría 14ª.
Por el acuerdo entre partes, el juez dispuso que por el plazo de un año el hombre fije domicilio, done mensualmente 3 mil pesos a la Fundación del Vilela, y entregue 10 mil pesos en concepto de reparación a la firma Rosario Bus.