Cristian Pity Álvarez, que este lunes fue trasladado desde el penal de Ezeiza hacia el Hospital Eurnekian por un pico de diabetes, deberá permanecer aislado en el nosocomio tras conocerce los resultados de un hispoado que se le realizó por protocolo y dio positivo. El músico está detenido en el pabellón psiquiátrico del Complejo Penitenciario de Ezeiza desde 2018.

Álvarez fue detenido por el crimen de Cristian Maximiliano Díaz, ocurrido el 12 de julio de 2018 en el barrio de Villa Lugano, Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Según confesó él mismo, le disparó cuatros tiros a la víctima tras una discusión, motivo por el cual está imputado por "homicidio agravado por el uso de arma de fuego", esperando ir a juicio oral por el delito que contempla una pena de 10 a 25 años de cárcel. 

En julio pasado, la justicia decidió extender su prisión preventiva seis meses más 

El músico fue trasladado a la Unidad 21 de Enfermedades Infecto contagiosas del Servicio Penitenciario Federal, ubicada en el barrio porteño de Parque Patricios, dónde permanecerá hasta que se cumpla el período de aislamiento. Una vez que esté recuperado y ya no sea portador de COVID-19, podrá regresar al Complejo Penitenciario 1 de Ezeiza.

El cantante está alojado en el sector del Programa Interministerial de Salud Mental Argentino (Prisma) del Hospital del Penal, donde se le realiza un tratamiento por su adicción a las drogas.

En julio pasado, la Sala II con el juez Horacio Días había decidido extender su prisión preventiva seis meses más, alegando posibles riesgos procesales si Pity volviese a Villa Lugano: peligro de fuga, entorpecimiento de la investigación o la chance de que amedrente a la familia de su víctima. 

La historia de consumos tóxicos que acarrea el cantante no se considera un atenuante frente a la posible dura pena que enfrenta. 

Pity Álvarez tiene una larga historia de consumos y adicciones

Días después del crimen que lo llevó a la cárcel, la madre del cantante, Cristina Congiú, contó lo que su hijo le había dicho luego de entregarse a la policía: “En uno de los audios que me mandó me dice que no va a poder soportar esto, que prefiere estar muerto. Él nunca se imaginó llegar a esta situación. Lo desconozco”, aseguró.

Álvarez también tiene otro expediente en su contra: en 2019 fue procesado con prisión preventiva por privar de su libertad, golpear y amenazar tras un show a dos mujeres, en la madrugada del 6 de noviembre de 2016.