La sesión del Senado nacional que estaba prevista para este miércoles, y que tenía como objetivo tratar una decena de proyectos de ley vinculados a temas sanitarios y de educación y la designación de jueces para combatir el narcotráfico, se frustró por falta de acuerdo entre los bloques políticos para dar el quorum requerido.

Consultado sobre lo ocurrido el miércoles, el presidente de la Cámara Federal de Apelaciones de Rosario Aníbal Pineda lamentó que no se haya podido avanzar en el tratamiento de "dos pliegos que son muy importantes" para Rosario.

En diálogo con Cada Día (El Tres), Pineda expresó: "Esto tiene consecuencias importantes. Por ejemplo, hay solamente tres cargos de fiscales de investigación en Rosario, de los cuales solo uno está cubierto en forma definitiva, y los otros dos son interinos. Uno de esos cargos interinos debía tratarse con el pliego del día miércoles".

En ese sentido, el camarista sostuvo este viernes que "hay que seguir reclamando por esta cobertura", y apuntó: "Si no tenemos una estructura con gente calificada para hacer investigaciones contra el narcotráfico, es muy difícil investigar en este contexto de inseguridad que tenemos".

Se postergó la designación de jueces para combatir el narcotráfico en Santa Fe


 

Se esperaban cuatro ascensos de funcionarios judiciales para este miércoles:

  • Román Pablo Lanzón: Juez de Cámara del Tribunal Oral en lo Criminal Federal Nº 2 de Rosario.
  • Matías Felipe Scilabra: Fiscal ante los Juzgados Federales de Primera Instancia de Rosario, y actual responsable de las principales investigaciones locales desde su lugar en la Procunar.
  • Ramiro Dillon Villamayor: Defensor Público Oficial ante los Tribunales Orales en lo Criminal Federal de Rosario, Defensoría Nº 3.
  • Pablo Andrés Vacani: Defensor Público Oficial ante el Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Santa Fe.

Cabe destacar que ninguno de los cuatro pliegos había recibido objeciones opositoras.

Líderes narco "siguen operativos" desde la cárcel


 

Por otra parte, Pineda destacó los datos que presentaron el lunes durante un encuentro del que participaron el gobernador Omar Perotti, el ministro de Seguridad Claudio Brilloni y "los equipos técnicos de los candidatos" de estas elecciones. En esa reunión se habló del "estado de situación de la Justicia Federal".

Uno de los puntos destacados por el camarista fue que en la actualidad "hay 2.004 presos federales a disposición de jueces de Rosario". Ese número "se triplicó" si se lo compara con el 2013, resaltó.

Pineda destacó el "gran volumen de investigaciones y de personas detenidas", aunque por otro lado reconoció que "también es una realidad que el problema del narcotráfico no se soluciona y la inseguridad sigue escalando".

"Eso nos obliga a todos a hacer un análisis más profundo sobre las causas, y si es suficiente abordarlo únicamente desde el derecho penal", dijo. En ese sentido, añadió que "ninguna acción por sí misma, en este contexto, va a ser la solución definitiva", e insistió en que hay que trabajar de manera conjunta para "cubrir los 15 cargos de fiscales federales que se dispusieron por la ley de fortalecimiento, solucionar el tema de las comunicaciones en las cárceles y luchar contra los problemas de adicción".

De lo contrario, sostuvo que actualmente están dadas las "condiciones para que el problema subsista". "Es una realidad tan apremiante, que como sociedad tenemos que internalizar la idea de que no solamente lo podemos abordar desde el derecho penal y la Justicia. Hay una problemática mucho más profunda que tiene que ver con las adicciones y el consumo de estupefacientes", indicó.

En la misma línea, enfatizó que a pesar de que "las primeras y segundas líneas de las grandes bandas" narcocriminales están condenadas y en cárceles federales, los responsables de ordenar delitos como homicidios "siguen operativos" desde allí.

Pineda también destacó un operativo de la Policía Federal a través del cual se logró desbaratar a la organización narcocriminal liderada desde la cárcel por Julio Rodríguez Granthon, señalado como el mayor proveedor de Los Monos y vinculado también comercialmente con el clan Alvarado.

"El organizador de todo estaba en una cárcel federal organizando toda la distribución", señaló el camarista, usando el caso como ejemplo de que cuando el control en las unidades penitenciarias no se aplica lo que sucede es que las condenas se convierten "en algo inútil".