Qué no hacer frente a un elefante
Cuando un inmenso animal de estos se acerca a la mesa donde estás por almorzar sólo tenés dos opciones: 1) quedarte realmente quieto, inmovil, o 2) salir corriendo despavorido y alejarte lo más rápido que puedas de la situación de peligro. Lamentablemente ninguno de los turistas tomó la decisión correcta. Por suerte el accidente no les provocó heridas de gravedad
En principio el movimiento del elefante no despierta demasiadas suspicacias aunque sí llama la atención como se acerca sin que nadie intervenga