Eligieron pésimo. Dos ladrones fueron a robar a un video club cuyo dueño resultó ser un policía. No sólo debieron responder a los tiros con los que trató de detenerlos sino que uno de ellos quedó tras las rejas.

De acuerdo a lo informado este martes por el periodista Héctor López en Radio 2, dos delincuentes armados ingresaron anoche a un video club ubicado en Superí al 1600 y redujeron a los presentes. Fueron a la caja y se alzaron con la recaudación. Sin embargo, no pudieron ir más allá.

Cuando iniciaban la fuga, se les presentó el dueño del local que resultó ser un policía. Sin mediar palabras, abrió fuego contra los ladrones que respondieron rápidamente. El tiroteo duró unos segundos y terminó con uno de los delincuentes, de 18 años, reducido. El otro logró escaparse.

La comisaría 10ª intervino en el hecho e incautó una moto en la que se movilizaba la pareja. El ciclomotor tenía pedido de captura, tras ser robada meses atrás.