Tal como sucedió el viernes pasado, la Agencia de Seguridad Vial emitió este miércoles un alerta vial, para prevenir a los conductores de toda la provincia respecto de fenómenos climáticos que ponen en riesgo a quienes transitan por caminos mojados.
Alerta vial para la región
Advierten a los conductores respecto de las malas condicione s en los caminos de la provincia debido a las incesantes tormentas. Recomendaciones para manejar en días de lluvia
Hace una semana que la región está bajo cielos grises, con lluvias y tormentas que se desatan en forma incesante. Esta situación constituye un riesgo para la conducción por lo que desde el organismo provincial emitieron un alerta con el fin de que los conductores que deban circular tanto en áreas urbanas como en rutas y accesos de la provincia aumenten al máximo la precaución para evitar sufrir inconvenientes.
Los expertos recordaron que la conducción con lluvia es un importante factor de riesgo ya que la visibilidad disminuye y la calzada se vuelve resbaladiza, complicando la adherencia del vehículo al suelo.
Desde la Agencia Provincial de Seguridad Vial ofrecen recomendaciones para tener un viaje seguro y evitar accidentes. En primer lugar, si es posible, evite viajar en estas circunstancias o retrasar la salida. Si debe salir, reduzca la velocidad. Mejore la visualización de su automóvil para que otros conductores lo vean. Todos los pasajeros deben llevar los cinturones de seguridad abrochados. Los niños deben viajar en los asientos traseros con los sistemas de retención adecuados a cada edad. Importante: no estacione sobre la banquina, sino sólo en zonas seguras donde la detención no implique un riesgo mayor. Mantenga el parabrisas limpio permanentemente.
Cuando se acumula agua en la calzada se produce un fenómeno físico muy frecuente en la conducción que es el “acuaplaneo” y se presenta cuando un vehículo ingresa a alta velocidad a un charco de agua, provocando la separación entre la llanta y el pavimento. En esas condiciones, la misma pierde contacto con el pavimento produciendo una gran inestabilidad del vehículo.
La única forma de evitar el acuaplaneo es bajar la velocidad de circulación todo lo que sea necesario para que las llantas puedan cortar la película de agua que se tiene que atravesar y no pierdan el contacto con el asfalto, y de esa manera mantener el control sobre el vehículo.
Si este efecto sorprende al conductor, ya dentro del charco de agua, por ningún motivo se deben ejecutar maniobras bruscas, sino que hay que tratar de desacelerar sin aplicar los frenos bruscamente y esperar a que el vehículo pierda velocidad y recupere el control.