Los datos suministrados por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) indicaban que la temperatura en la ciudad había descendido un grado en unas dos horas. Es que pasadas las 6, cuando todavía estaba oscuro, la mínima era de un grado y parecía que no iría por debajo del cero.
Pero pasó. Salió un sol tibio entre las nubes y el termómetro descendió por debajo del cero. Aire congelado y la necesidad imperiosa de taparse con lana sea como sea, y de tomar un café caliente, cada uno en su casa.