Feni Rubio

Los ataques destructivos contra quien alguna vez fue pareja o lo sigue siendo, es en la mayoría de los casos los puntos en común de los hechos que atentan contra la integridad física y psíquica de las mujeres que padecen violencia. Los casos fatales lamentablemente siguen en aumento. El maltrato ya sea desde un lugar de sometimiento, hasta ataques que terminan en violación, en una persecución silenciosa y con peor final: el femicidio, son algunas de las tantas formas de la violencia de género que se dan dentro del hogar.

Un dato que alarma sigue siendo la cantidad de mujeres que terminaron sus vidas prendidas fuego por sus parejas. El caso más relevante fue el de Wanda Taddei, quien falleció por las quemaduras generadas tras una pelea con su pareja, uno de los ex integrantes de Callejeros, grupo involucrado en la tragedia de Cromañón. Desde entonces y como un círculo vicioso, muchos son quienes siguieron y siguen ese método para poner fin a una relación de la cual no pueden salir sin lastimar o lastimarse.

El caso más reciente que tuvo lugar en la provincia sigue haciendo que Santa Fe sea una de las más sensibles ante este tipo de hechos. Maira Alonso, de tan solo 24 años y madre de dos hijos, falleció tras agonizar 24 horas en el hospital provincial "Dr. José María Cullen" de la capital provincial. La joven había sido internada de gravedad producto de las serias quemaduras presentes en gran parte de su cuerpo. Su pareja, el principal sospechoso.

La muerte de Maira se suma a otros que tuvieron un desenlace fatal. En 2013 en la ciudad de San Lorenzo la vida de Romina de 32 años fue arrebatada por su pareja de 60 con 20 puñaladas. Luego del hecho, el asesino intentó quemar la casa en un vano intento de suicidio.