Los colegios electorales en Francia abrieron hoy para la segunda vuelta de las elecciones municipales, en una cita en la que los votantes podrían volver a asestar un duro golpe al presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, que asumió el cargo hace sólo diez meses.

Su partido conservador, la Unión por un Movimiento Popular (UMP), podría volver a registrar retrocesos en todo el país, en unos comicios considerados un test de apoyo para el jefe del Elíseo, informó la agencia DPA.

Los colegios electorales abrieron a las 08:00 horas locales (07:00 GMT) y cerrarán a las 20:00 horas (19:00 GMT).

La reelección del socialista Bertrand Delanoë en París es casi segura y en Estrasburgo el ingreso de la izquierda a la alcaldía es prácticamente un hecho.

Marsella y Toulouse serán escenario de carreras cruciales. Si los socialistas logran el control de las cuatro ciudades, sumarían ya ocho de las 10 mayores ciudades del país.

En Marsella y Toulouse, sin embargo, las carreras se prevén ajustadas, y los votantes del centrista MoDem del ex candidato presidencial Francois Bayrou podrían tener la clave del resultado.

De acuerdo con la prensa, el mandatario remodelará su gobierno, así como su gabinete de asesores. También podría considerar ralentizar sus reformas.

El domingo pasado, un total de 44 millones de franceses y ciudadanos de la Unión Europea con residencia en el país estaban convocados a elegir a sus alcaldes y consejos comunales en más de 36.000 localidades.

Para los politólogos, los malos resultados registrados por los conservadores en la primera vuelta reflejan el rechazo de los votantes al estilo de Sarkozy, que ha exhibido su relación amorosa con su nueva esposa, Carla Bruni.