El titular de la cámara de supermercadistas de Rosario, Roberto Lázzaro explicó a Rosario3.com que “todavía se está dentro de un esquema recesivo importante”. El empresario estimó que desde marzo hasta hoy el descenso de las ventas estuvo en el orden del 6 u 8 por ciento. “Las subas y bajas de los precios dependen de los rubros. Algunos tienen compartamientos muy cíclicos y suben en grupo cada tres ó cuatro meses. Hace un mes que vienen subiendo las bebidas gaseosas y los vinos, la semana pasada subieron los lácteos y se espera un incremento del 5 por ciento en los quesos para esta semana”, dijo Lázzaro.
Para el supermercadista, las subas no tuvieron que ver con el conflicto agropecuario sino con un “proceso inflacionario global”. En general, cree que las bajas ya están tocando “su piso” y considera probable que no continúen. Además, dijo que los temores de los consumidores no se diluyeron todavía.
Gerardo Di Cosco, secretario general de la Asociación de Industriales Panaderos, explicó que el pan en Rosario se mantendrá en el precio actual por unos cuantos meses. En pleno conflicto –hace 25 días– las panaderías aumentaron el precio en el mostrador entre un 15 y un 20 por ciento. Según Di Cosco, con ese aumento fue suficiente : “Las bolsas de harina se van a mantener en el mismo costo y el pan también por el resto del año. No será necesaria otra suba, excepto que aparezca algo extraordinario como aumento de impuestos o de salarios para trabajadores del sector”, explicó Di Cosco.
Desde el punto de vista de los consumidores, la titular de la Asociación de Defensa de los Consumidores y Usuarios de la Argentina (Adecua), Sandra González dijo a Rosario3.com que de acuerdo a las prácticas de los mercados argentinos “siempre se está más cerca de que los precios queden como están a que bajen a pesar de que aumente la oferta”. “Después del paro del campo y los piquetes entraron toneladas de carne al mercado de Liniers y sin embargo los cortes sólo bajaron en los supermercados. En las carnicerías no hubo ningún corte más barato”, dijo González y aclaró que en las carnicerías se vende el 60 por ciento de la carne que se consume en la Argentina.
Para la integrante de la asociación de consumidores, las ventas mermaron en los últimos cuatro meses por el temor de los consumidores y es incierto el panorama para las próximas semanas. “La gente está diciendo el bolsillo se lo tiene que cuidar solo”, ilustró.
Además analizó que no todos los aumentos tuvieron que ver con el conflicto agrario. “Entiendo que hayan aumentado la leche, los aceites, la carne en un momento. Pero ¿por qué me aumentan la prepaga, por qué los repuestos para el auto?”, se preguntó González.