El gobierno de la provincia lanzó una nueva tarjeta magnética que reemplazará a los tickets sociales. Si bien todavía no debutó en la práctica, el nuevo mecanismo ya generó polémica: es que si bien desde los ámbitos oficiales aseguran que este sistema ayudará a “eliminar intermediarios y impedir el clientelismo, los pequeños comerciantes denuncian que beneficiará sólo a los grandes hipermercados.

Con la promesa de la puesta en funcionamiento en “los próximos días”, el Ministerio de Desarrollo Social lanzó la Tarjeta Única de Ciudadanía, un instrumento que reemplazará a los ticket Santa Fe Vale, Nutrir Más y Celíacos. En este marco, los representantes de los autoservicios y pequeños comercios expresaron su descontento porque dicen que el nuevo sistema beneficiará a los grandes hipermercados que tienen el posnet para cobrar con el plástico.

El nuevo sistema de implementación del Programa Nacional y Provincial de Seguridad Alimentaria comenzará a funcionar en los próximos días y alcanzará a 145 mil beneficiarios. Será instrumentado desde el Ministerio de Desarrollo Social en conjunto con el Banco Municipal de la Ciudad de Rosario y la Tarjeta Cabal.

Según el Ministerio, esta tarjeta permitirá “imprimir mayor transparencia y ejecutividad en las prestaciones” y agregan que de esta manera se evitará “la logística que implicaba la distribución de los tickets o cajas alimentarias”.

Por otra parte, y entre otras ventajas citadas por los funcionarios del área social, se menciona que la bancarización de los planes “elimina los márgenes de intermediación en la ayuda social e impide actitudes clientelares”.

El titular del Centro de Unión Almaceneros, Juan Milito sostuvo en diálogo con Rosario3.com que la implementación de la tarjeta “no es un adelanto” y se mostró molesto porque los autoservicios y pequeños comerciantes no fueron consultados.

El dirigente sostuvo que “con el anterior mecanismo de los tickets existía un círculo virtuoso en el que se beneficiaban la gente que los recibía, los negocios de la periferia, los pequeños comerciantes y sólo los mayoristas de la provincia de Santa Fe”.

Ahora –según Milito– se beneficiarán “los grandes hipermercados que tienen el Posnet” (el aparato por donde se pasa la tarjeta para realizar el débito). El servicio de posnet para tarjetas está manejado por una sóla empresa en Argentina y para adquirirlo se deben pagar 90 pesos más IVA por mes en concepto de alquiler, una cifra que no todos los comercios pueden afrontar.

En ese sentido, el titular de la Unión de almaceneros pidió al gobierno de Santa Fe que “articule mecanismos para proteger a los pequeños comercios de la periferia que se perjudicarán con la nueva tarjeta”.

Modos de uso

La Tarjeta Única funcionará a través de un sistema de débito vía pos o activación telefónica. Todos los meses se acreditará en cada cuenta el monto del beneficio, el cual podrá ser utilizado para comprar alimentos en negocios adheridos a la red. Por el plan Santa Fe Vale se acreditan 80 pesos mensuales y por Celíacos 100 pesos. Nutrir más está destinada a familiares de menores de 6 años con problemas de desnutrición.

La tarjeta no podrá ser utilizada para retirar el dinero, ni para adquirir bebidas alcohólicas, cigarrillos, golosinas y ninguno de los alimentos no permitidos. El titular del beneficio sólo deberá concurrir a los comercios con su DNI. No se le requerirá ningún tipo de clave de ingreso.

Los tickets

A mediados de agosto, los beneficiarios de los vales sociales y los comerciantes mayoristas mostraron su precupación por la falta de certidumbre en la transición a un nuevo sistema de entrega de ayuda social.

Los tickets “Santa Fe vale” y “Nutrir más” habían dejado de circular porque los comercios temían no poder cobrarlos, finalizada su validez con el ingreso de la tarjeta.

La empresa Proms, encargada de emitir los valores que luego se reparten entre familias de bajos ingresos, finaliza su tarea una vez caído el mecanismo de los tickets. Es por eso que los comerciantes temieron no poder cobrar en efectivo los bonos y, ante la incertidumbre, muchos almacenes y pequeños supermercados dejaron de recibirlos como forma de pago.

La empresa encargada de emitir los vales recibe un depósito de dinero del gobierno de Santa Fe para respaldar los valores en el mercado. Luego, la firma Proms entrega los tickets que son distribuidos entre familias de bajos recursos para que realicen compras de artículos de primera necesidad en comercios de hasta 4 cajas.

Los pequeños comercios descargan esos vales comprando en los mercados de productores o en los supermercados mayoristas de la provincia. Los grandes comerciantes de mercaderías cierran el círculo llevando esos vales a la compañía que los emite para que entregue el dinero en efectivo.

Pero ante la incertidumbre por la salida de Proms, el círculo dejó de funcionar: mayoristas y minoristas que temían no poder cobrar los tickets dejaron de recibirlos.