Roman Atwood lo hizo de nuevo. El bromista que se hizo conocido en Internet por montar situaciones falsas (pranks), que graba y luego sube a YouTube, encontró un nuevo aliado en el frío que azota a los Estados Unidos.

Esta vez, Atwood, junto a Dennis Roady y equipo, aprovechó el gélido ambiente para hacer un truco que, no por viejo resulta menos efectivo: acercar la lengua al hielo y fingir que esta se queda pegada.

La cámara oculta se montó en plena calle y, aunque resulte inverosímil que alguien ande lamiendo postes helados en la vereda, varios peatones se vieron sorprendidos por la escena.

Los bromistas pedían ayuda y, cuando lograban despegar la cara de del bloque de hielo resultaba que habían perdido la lengua en el intento.