El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) dió a conocer que durante 2010 los bovinos de las categorías toros y vacas deberán ser vacunados una vez al año, en el marco de su plan de vacunación contra la fiebre aftosa. En Santa Fe se inoculará a menor cantidad de ganado dado que la crisis se llevó más de medio millón de cabezas.
En el marco de la nueva normativa el Servicio ha iniciado el proceso legal y administrativo que, entre otras cuestiones, contempla notificaciones nacionales e internacionales. En relación a los animales menores y las demás categorías bovinas y bubalinas, continuarán recibiendo la vacuna dos veces al año.
El mecanismo para adoptar esta medida, que alcanza a los animales en el territorio argentino reconocido por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) como libre de aftosa con vacunación —el área de mayor concentración ganadera—, reconoce como fundamento técnico-científico la alta cobertura vacunal del rodeo bovino luego de 16 campañas de vacunación totales y consecutivas desde 2001, según se informó desde Senada.
Menos ganado para vacunar
De acuerdo a los datos de la segunda campaña de vacunación contra la fiebre aftosa, la provincia perdió más de 500.000 cabezas de ganado durante el 2008. La crisis y la sequía los principales factores de la baja.
Ana Canal, directora de Sanidad Animal, sostuvo al sitio Infocampo que si bien fue muy importante la mortandad de animales por la sequía y la falta de alimentación bovina, la principal causa de la baja fue la falta de expectativas de los productores.
"Hay una marcada tendencia de los productores de deshacerse de la hacienda y venderla por la pérdida de rentabilidad que hoy por hoy tiene el negocio y la actividad en general", indicó la especialista.
De acuerdo a lo publicado, la segunda inoculación del año pasado arrojó un total de 7.234.670 contra 7.800.000 del mismo período de 2007, según datos preliminares que maneja la Dirección de Sanidad Animal de la provincia.
Los mayores descensos se registran en las categorías vacas (- 236.700 cabezas), vaquillonas (- 85533). Mientras que en el caso de los terneros, la caída superó las 66.000 cabezas, detalla el informe.