Santiago Salcedo está a punto de pasar a River, y no es poca cosa. Después de interminables negociaciones durante las cuales el traspaso pasó por todos los estados posibles, la intermediación del empresario Fernando Hidalgo fue la llave que abrió la puerta de la venta tan pretendida por Newell’s y tan esperada por el Millonario, sobre todo por el técnico Diego Simeone.

Los encargados de continuar las enredadas tratativas este jueves, fueron el representante del jugador Pedro Aldave y el dirigente riverplatense Mario Israel, mano derecha del presidente José María Aguilar en el rubro incorporaciones. El titular rojinegro, Eduardo López, monitoreó las operaciones desde su despacho del centro rosarino, a celular abierto.

Dos hechos ocurridos durante el día, dan la pauta de que el pase está técnicamente hecho, a pesar de que todavía falta la firma del jugador. En Rosario, López llevó tranquilidad al plantel al aseverarle al capitán Rolando Schiavi que este viernes se pagarán todos los sueldos atrasados. Y en el predio de Ezeiza, el cholo Simeone recibió el llamado que tanto esperaba: “Lo de Salcedo está casi hecho”, le dijeron desde el otro lado del teléfono.

En conclusión, los empresarios Fernando Hidalgo y Miguel Pirés, quienes acercaron al grupo inversor, junto a Aldave, viajarán este viernes a Rosario para cerrar detalles con López. Salcedo pasaría a River a préstamo por un año, con opción de compra definitiva, pero Newell’s recibirá el dinero en efectivo de los empresarios. La revisión médica del delantero paraguayo ya está pautada para el lunes.

De esta forma, el presidente de la Lepra podrá contar con el dinero que le reclama el plantel y podrá cerrar las contrataciones de Cristian Fabbiani, Hugo Barrientos y Leandro Armani.