El presidente de Cataluña, Carles Puigdemont, asumió este martes lo que consideró "el mandato" del referéndum del 1º de octubre para que la región sea independiente, pero suspendió los efectos de la declaración de independencia para abrir un proceso de diálogo. En tanto desde el gobierno central, fijaron como fecha límite el 20 de octubre para encontrar una salida al conflicto. El vice alcalde de Barcelona, Gerardo Pisarello, consideró que la postura de Puigdemont abrió una “pequeña tregua” pero advirtió que si no hay diálogo debería llamarse a elecciones para encontrar mejores interlocutores.

“Todo indica que podemos entrar en una etapa de una pequeña tregua donde se intenta ganar tiempo”, analizó Pisarello la declaración de “independencia en suspenso” en contacto con A Diario, el programa que conduce Alberto Lotuf por Radio 2.

El vice alcalde, que nació en Argentina pero vive en España desde la década del 90, opinó que Puigdemont se expresó de forma “ambigua” con la “intencionalidad de no declarar la independencia de forma explícita y abrir una instancia de diálogo”.

Con todo, el clima ahora es tenso, sobre todo a partir de la fecha límite que puso el gobierno español para “terminar con una insostenible situación de confusión”.

Sin embargo, Pisarello no descartó una salida que incluya cierto “encaje” de Cataluña con el resto de España pero advirtió contra una nueva represión.

En tal sentido, sostuvo que “si no se abre un escenario de diálogo, si los interlocutores de ahora no pueden establecer una salida política sensata, habrá que llamar a elecciones y dar paso a otra gente”, tanto para reemplazar a Puigdemont como a Mariano Rajoy.