En tanto, policía y bomberos intentaron bajar a los militantes que no dejaban de moverse a través de arneses para exigir a los legisladores porteños que aprueben el plan.
Hubo un momento gracioso cuando, después de las 8, los efectivos comenzaron a subir al Obelisco para hacer descender a los militantes ambientalistas, sin lograr alcanzarlos.
En las alturas y a la vista de todos, los hombres lograron colgar la leyenda en el monumento: "Buenos Aires, primero en contaminación: Basura cero ya". De esta forma, Greenpeace intenta poner de su lado a los legisladores porteños que este miércoles analizarán proyectos que promueven la basura no contaminante.