María Inés recurrió desesperada a Radio 2. La mujer acompañaba a su marido, desde las tres de la mañana, en una ambulancia de Emerger en un verdadero peregrinar en busca de una cama para internar a su marido que estaba en medio de un coma diabético. Pero tardó cinco horas en poder alojar a su esposo en un centro de salud.
Recién pasada media hora de las 7, logró que en el hospital Carrasco le hagan algunos análisis y a los pocos minutos consiguió que le hicieran un lugar en el hospital Centenario.
El hombre sufre de un coma diabético y su salud peligra a medida que transcurren las horas. A las tres de la mañana fue conducido de emergencia en una ambulancia de Emerger al Hospital Centenario, sin suerte alguna. Desde la guardia del hospital le informaron que no había camas disponibles en terapia intensiva.
Tampoco obtuvieron una buena nueva en el hospital Carrasco donde la respuesta fue la misma. “Me dijeron que no hay cama para mi marido y no sé que vamos a hacer porque está muy grave”, se lamentó María Inés, este lunes, bien temprano, por la radio. “Tiene un coma diabético y hace cuatro horas que deambulamos en esta ambulancia que lo está atendiendo muy bien pero necesita ser internado”, continuó a modo de petición.
Afortunadamente, luego de que el paciente fue atendido por personal médico del hospital Carrasco que le efectuaban controles. Más tarde y casi a las cinco horas de haber iniciado la búsqueda de una cama, en el Centenario le confirmaran un lugar.