El portal readwriteweb.es señala que la tecnología desarrollada consiste en filamentos óxido de zinc situados entre dos electrodos. Encima de este mecanismo hay una tabla que absorbe el sonido vibra cuando las ondas llegan e impactan. Esto hace que las tiras de óxido de zinc se compriman y se expandan generando energía eléctrica que servirá para cargar la batería.
Por el momento es el primer paso ya que el mecanismo funciona con cualquier tipo de ruido y que cada vez hay más contaminación acústica puede que en un futuro el móvil se cargue él solito.