El debate nacional sobre las modificaciones que se realizarán en el nivel secundario en el país ya tiene fecha: entre el 15 y el 20 de noviembre. Así lo confirmó el viceministro de Educación de la Nación, Alberto Sileoni, quien aclaró que la modalidad de la consulta se decidirá el próximo martes en la reunión del Consejo Federal, conformado por los funcionarios del área de todo el país.

De esta manera, los ministros de Educación de las provincias discutirán de qué manera se "bajará" a las escuelas el llamado "Documento preliminar para la discusión sobre la educación secundaria", que ya se encuentra en poder de las jurisdicciones.

El borrador de la iniciativa apunta a garantizar la obligatoriedad del nivel (prescripta por ley) y mejorar la calidad educativa. En un diagnóstico realizado por la Nación queda en evidencia la necesidad de incluir a más de medio millón de alumnos que hoy no están escolarizados.

"El borrador oficial estará en todas las escuelas del país en pocos días más para realizar una jornada de debate a mediados de noviembre", precisó Sileoni. En este sentido, el viceministro nacional remarcó que en la reunión con los representantes provinciales se discutirá la operatoria de la consulta. Esto supondrá decidir si cada provincia lo hará en la fecha que más le convenga o se unificará el día de debate en todo el país; también falta decidir si dicha jornada será laborable.

El Ministerio de Educación de la Provincia no quiso adelantar posición sobre el contenido del borrador. No obstante, trascendió que propondrá en el Consejo Federal que el debate se realice en febrero. "Si hay consenso de todas las provincias para hacerlo ahora, se hará todo lo posible para que salga bien", manifestó una fuente ministerial.

El documento de debate impulsa cambios obligatorios en el nivel medio. El borrador habla de disminuir la cantidad de materias y propone la concentración horaria de los docentes en un solo establecimiento. Para ello se impulsa la creación de cargos que suplantaría a las horas aisladas en diversos colegios.

"La propuesta de organización curricular incluye, entre otras cosas, el intento de reducir el número de asignaturas, aunque no se puede poner un número porque las provincias tienen realidades muy diferentes", sostuvo Sileoni.