El caso se conoció desde la voz de Fernanda Gómez Odette, quien se desempeña en el Instituto de Lucha Antipoliomielítica y Rehabilitación del Lisiado (Ilar), y que a través el móvil de Radio 2 denunció: “Acompañé a dos personas en sillas de ruedas al recital del martes en Central. Nos dejaron entrar por el campo pero no había un lugar destinado ni vallado. Empezamos a preguntar a policías y organizadores pero decían desconocer la ley que obliga a que haya un lugar destinado a discapacitados”.
Según su relato, ante la indiferencia de los organizadores del espectáculo terminaron acomodándose en un rincón del campo desde donde sólo veían a los cantores españoles por la pantalla gigante. “Nadie se solidarizó y todos decían que no podían hacer nada al respecto”, se lamentó Fernanda.
A pesar del desconocimiento de los organizadores del recital, existe una norma provincial que obliga a la constitución de un espacio destinado a personas discapacitadas o con dificultades en la movilidad tanto en espectáculos públicos como privados. La confirmación fue realizada por el abogado Carlos Colere e integrante del Movimiento de Unidad de Ciegos y Ambliopes de Rosario (Mucar) a Rosario3.com
“Existe una ley, la 9.325 que fue modificada en algunos artículos y que prevé un lugar especial para los discapacitados. La norma está, pero no se cumple. Pero no es sorpresa cuando tampoco hay accesibilidad en las escuelas para niños y adolescentes con problemas para desplazarse”, apuntó. “Hay lugares como teatros o cines que sí lo destinan, también en las canchas, pero generalmente, son las plazas que no se venden o detrás de alguna columna”, precisó.
Sobre lo ocurrido en la cancha de Rosario Central, Viviana Marchetti, de la Dirección para la Inclusión de Personas con Discapacidad de la Municipalidad manifestó: “Se tiene que respetar un lugar para la gente discapacitada. Si los empresarios permiten que ingresen deben garantizarles un espacio desde el cual puedan apreciar el espectáculo”.