El gobierno de Santa Fe se presentó este lunes ante la Justicia Federal para denunciar que un represor de la última dictadura militar viola la prisión domiciliaria, dijeron voceros judiciales.
Denuncian que un represor viola la prisión domiciliaria
Se trata de Nicolás Correa, quien cumple su condena en su casa en un barrio de la capital provincial. Está procesado en la denominada "causa Brusa"
Se trata del represor Nicolás Correa, quien cumple prisión en su casa del barrio Candioti de la capital provincial debido a que está procesado en la denominada "Causa Brusa" por delitos de lesa humanidad.
Todo comenzó con una investigación publicada por el Diario Uno, en su edición de este lunes, que aporta fotografías en las que se puede ver a Correa (próximo a cumplir 80 años) en el exterior de su casa ubicada en Maipú 1973.
Reporteros gráficos de la publicación realizaron una guardia y comprobaron que Correa salió de su domicilio al menos en dos oportunidades. Un artículo asegura que va cotidianamente a hacer las compras y no es raro que se detenga a dialogar con vecinos.
Correa está procesado por el presunto delito de tormentos, privación ilegítima de la libertad, coacción, vejaciones y apremios ilegales y aun debe ser indagado por presunta asociación ilícita.
Correa se retiró en 1976 mientras se desempeñaba en el Destacamento 122 de Inteligencia de Santa Fe y diversos testimonios lo señalan como el jefe de un grupo que se dedicaba a torturar detenidos. Correa es uno de los nueve procesados por el juez federal Reinaldo Rodríguez en la causa Brusa.
Los otros son Domingo Marcellini, Juan Orlando Rolón, Juan Perizotti, Héctor Colombini y Mario Facino (todos con prisión domiciliaria); Víctor Hermes Brusa y Eduardo Ramos, alojados en el cuartel de Bomberos, y María Eva Aebi, presa en la Estación de Tránsito para Mujeres.
Luego de la publicación del diario, el secretario de Derechos Humanos de Santa Fe, Domingo Pochettino, se presentó ante la Fiscalía Federal de Santa Fe para denunciar la situación.
El funcionario dijo a la prensa que la Secretaría de Derechos Humanos planteó en más de una oportunidad que "no existan situaciones de privilegio" para los represores, en alusión a la prisión domiciliaria.
"Que los represores estén caminando por las calles significa terror para los propios testigos. Además, hay razones que ameritan que se vuelva atrás por la peligrosidad de estos sujetos y más aún, con las causas en trámite de los testigos", expresó Pochettino.
Fuente: Télam