En diálogo con Radiópolis, el programa que conduce Roberto Caferra por Radio 2, el comisario inspector Sergio Rebollosa, jefe de la dependencia de Nogoyá contó cómo se desbarató una red de trata por puro azar.
“Investigábamos algo totalmente distinto, algo tan sencillo como un celular sustraído en el drugstore de una estación de servicio”, comenzó Rebollosa. A partir de la denuncia del robo y del estudio de las cámaras de vigilancia del lugar –continuó– se determinó que la ladrona era una mujer que se movía en un grupo más amplio. En total eran 16 personas que, repartidas en tres autos, habían parado en esa estación desde el autódromo de Concepción del Uruguay.
Entonces, se dio aviso al puesto caminero y “a mitad de camino entre Paraná y Gualeguaychú” se los detuvo. “Casi todas eran prostitutas con ingreso en la policía, con antecedentes. Entre ellas había tres trans y cinco sin ningún tipo de documentación. Una de ellas era una chiquita de 16 años que en principio dijo que tenía 18 y dio un apellido falso”, precisó y dijo que fue esta misma adolescente la que reveló el verdadero rubro delictivo del grupo.
“Entró en confianza con el personal policial femenino y les terminó pidiendo auxilio a una de las oficiales. Les dijo que era víctima de trata y que un proxeneta la obligaba a prostituirse bajo amenazas”, contó el comisario.