Hay personas que ante el más mínimo cambio de tiempo se resfrían, mientras que otras puede soportar cualquier tipo de variación térmica sin que nada los afecte. Investigadores de la Universidad de Yale encontraron el motivo.

Los científicos estudiaron el comportamiento de diversas células del organismo en presencia del rhinovirus (el responsable de la mayoría de casos de resfrío común) y realizaron importantes descubrimientos.

Ocurre que cuando el virus del resfrío penetra en nuestro organismo, las llamadas células epiteliales reaccionan para tratar de evitar sus efectos, según consignó Science Daily. Por ese motivo, los investigadores tomaron muestras de dichas células a varios voluntarios y las extrajeron de las fosas nasales y de los pulmones.

Al exponer las células a la acción del rhinovirus, encontraron que la respuesta inmunológica era más fuerte en las células procedentes de las fosas nasales, pero era más duradera en la de los pulmones. Por otro lado, observaron que las células mermaban en sus funciones cuando, además del virus, se las exponía a otro agente estresante, como el humo de los cigarrillos.

A partir de ello, concluyeron que los fumadores, aquellos que padecen el humo del tabaco de forma pasiva y los que se exponen con frecuencia al polvo, tienden a resfriarse con mayor facilidad que el resto.