Los 9.500 trabajadores municipales aceptaron, a través de sus 200 delegados, que el aumento sea en forma escalonada, remunerativa y bonificable. Un 10 por ciento se aplicará a los haberes básicos a partir del 1º de agosto y el 10 por ciento restante, desde el 1º de noviembre. Con el aumento, el sueldo mínimo de un activo se elevará de 850 a a 1.020 pesos y el sueldo más elevado de un agente de planta permanente subirá de 2.000 a 2.400. La mejora salarial influirá en el medio aguinaldo y además se verán beneficiados 4.500 pasivos (pensionados y jubilados).
Por su parte, el intendente de la ciudad Miguel Lifschitz, señaló que para el municipio el desembolso repercutirá en "ajuste y reducción del plan de obras dispuesto para la ciudad".