La convocatoria gastronómica por el Día del Amigo presenta esta semana un ritmo mucho más tranquilo que años anteriores, sobre todo en lo que hace a reservas en restaurantes, bares y comedores que suelen poblarse de rosarinos de todas las edades con ánimo festivo.

Y lo que amenaza con ser una baja importante en la facturación en ese tipo de comercios, obedece a varios motivos puntuales: la incertidumbre económica que se generó a partir del conflicto entre el campo y el gobierno e influyó en todos los rubros, el aumento de los costos, y por ende de los menúes, y el día de la semana con el que coincide el 20 de julio este año: domingo.

“Las reservas hasta ahora vienen bastante flojas –afirmó a Rosario3.com, Rodrigo Pastor, presidente de la Asociación Empresaria Hotelero Gastronómica de Rosario (AEHGAR)–, en la mayoría de los comercios con los que tenemos contacto no llegan al 50 por ciento de los cubiertos disponibles”.

Para los dueños de bares y restaurantes, el hecho de que el festejo coincida con el fin de semana, no es demasiado alentador, porque son días en los que de por sí, facturan a buen ritmo, mientras que las mesas multitudinarias, armadas con menúes fijos, tienen un consumo limitado y son de baja rotación. Por el contrario, les resulta mucho más conveniente que la salida masiva se produzca un martes o miércoles, cuando las ventas son bajas.

Además, quienes manejan el rubro gastronómico desde hace años, analizan el fenómeno en perspectiva y concluyen que el domingo no es buen día para programar el festejo, ya que el lunes es un día laborable y muchos prefieren salir viernes o sábado para disfrutar más de la noche.

Aparte de las numerosas ofertas de menúes especiales para esa fecha, a sólo seis días del 20 de julio, los grandes salones de eventos como Metropolitano y Terrazas que organizaron sendas fiestas dedicadas al culto gastronómico y bailable de la amistad, siguen invitando al público a anticipar su reserva, algo que este año, al parecer se podrá hacer hasta los últimos días con comodidad.