El cielo celeste que coronaba este domingo de primavera se veía recortado por espesas columnas de humo que emanaban con mayor intensidad frente al Museo de Arte Contemporáneo de Rosario (Macro) y la zona portuaria, desde la orilla entrerriana.

Es que, según lo demuestran alas evidencias fotográficas, en las islas entrerrianas aún se siguen quemando pastizales que beneficia a un puñado de productores ganaderos, a pesar de que el gobierno municipal haya interpuesto una acción judicial para que cesen los incendios y se hayan reunido los gobiernos provinciales comprometidos tras lo cual se firmó un compromiso de terminar con esta práctica.

Este domingo, al igual que el sábado, el humo formó parte de la postal de la ciudad de Rosario, un indicador de que el medio ambiente sigue siendo perjudicado.