Un hombre sembró el pánico al abrir fuego este viernes en las cercanías del tradicional edificio Empire State, de Nueva York, donde hirió a al menos nueve personas antes de ser abatido por la policía. En total los muertos eran dos.

"Ha muerto el atacante y una segunda persona, y otras nueve han resultado heridas, algunas de forma accidental por disparos de la policía", dijo el alcalde Michael Bloomberg, en una rueda de prensa acompañado del jefe de la policía, Raymond Kelly.

Este último señaló que el atacante tenía como objetivo su antiguo jefe en una empresa de la que fue despedido, por lo que se descartó que lo ocurrido tenga que ver con una amenaza terrorista.

Los heridos fueron llevados a varios hospitales de Manhattan, entre ellos el de St. Luke y el de Bellevue, mientras que se ha cortado el tráfico en la céntrica ubicación del edificio, situado en la calle 34 entre la Quinta y la Sexta Avenida de la Gran Manzana.

El diario New York Post adelantó en su web que el tiroteo ha dejado ocho heridos y dos muertos, uno de ellos el autor y otro una mujer que se encontraba de paso por las puertas del icónico rascacielos neoyorquino.

El hecho causó escenas de pánico entre los numerosos transeúntes que a esa hora acudían a sus puestos de trabajo y la gran cantidad de turistas presentes.

El emblemático Empire State Building de Manhattan es una de las principales atracciones turísticas neoyorquinas. En toda la zona se desplegó un fuerte operativo de seguridad.