El intendente Miguel Lifschitz abrió este jueves el período ordinario de sesiones en el Concejo con un discurso que puso el acento en la deuda social, aspecto en el que no ahorró críticas al gobierno provincial. Además, dijo que en uno de los temas más complicados que afronta la ciudad, la crisis del transporte, con la nueva licitación se inicia un período de transición por cierto largo: 7 años.

Lifschitz se manifestó muy preocupado por los bolsones de pobreza y exclusión que pese al crecimiento económico persisten en la región y reclamó a la provincia mayor participación de la ciudad en los diseños de políticas vinculadas a la seguridad y la educación.