El técnico del Granada, Lucas Alcaraz, alinea a un mexicano (Ochoa), un francés (Foulquier), un camerunés (Hongla), un islandés (Ingason), un uruguayo (Gastón Silva), un español (Héctor), un nigeriano (Uche), un ghanés (Wakaso), un brasileño (Andreas Pereira), un marroquí (Carcela-González) y un colombiano (Adrián Ramos).
El equipo rojiblanco ya había estado a punto de protagonizar este hecho en encuentros anteriores, aunque se había quedado en un par de ocasiones en diez nacionalidades diferentes en su once titular.