¿Está mal que el perro duerma con nosotros en la cama? Dicho de otro modo: ¿es desaconsejable desde el punto de vista de la salud? Ese fue el punto de partida de una investigación que desarrolló la Clínica Mayo, en Estados Unidos.

Para responder el interrogante, el centro de salud monitorizó el sueño de 40 voluntarios (con una media de edad de 44 años) que dormían con sus perros (mayores de seis meses y de diferentes tamaños).

Y también les colocaron señores en los collares a los pichichos.

La conclusión a la que arribaron es que dormir junto a tu mascota en la cama o en la misma habitación no provoca trastornos que afecten al descanso de forma grave.

La investigación, que reproduce Science Alert, concluyó que las personas monitorizadas estuvieron una media de 7.9 horas en la cama, de las cuales 6.7 horas fueron durmiendo. Esto supone una media de eficiencia del sueño del 81 por ciento (el porcentaje satisfactorio se sitúa en el 80 por ciento).


La diferencia radicó en si el perro dormía o no en la cama. Si lo hacía en la cama, la eficiencia se situaba en el 80 por ciento, mientras que subía al 83 por ciento si el pichicho no compartía el lecho.

"La presencia de un perro en el dormitorio no afecta al descanso de los humanos, tal como se preveía antes del experimento", concluye el informe de la Clínica Mayo. Ahora sí: ¡Guau!