Tras el pedido formal de un turno para contraer matrimonio por parte de Martín Peretti Scioli y Oscar Marvich, denegado este lunes por la jueza Silvia Murillo en virtud de la legislación vigente que no contempla el casamiento entre personas del mismo sexo, el tema se instaló en el centro del debate.
“En Santa Fe, como en resto de las provincias argentinas, las leyes no pueden avanzar por encima de la legislación nacional que hasta la fecha no contempla el matrimonio entre personas del mismo sexo”, aseguró a Rosario3.com el presidente de la Cámara de Diputados de Santa Fe, el socialista Eduardo Di Pollina.
El legislador fue autor de un proyecto de modificación al Código Civil presentado en la Cámara de Diputados de la Nación en 2005, con el fin de equiparar la legislación argentina a la vigente en España en la actualidad. Hasta fines de este año su proyecto tiene estado parlamentario, pero las posibilidades de que sea tratado y aprobado en el recinto son escasas, dado que se trata de un tema que cuenta con adeptos y detractores en todos los bloques.
A pesar de que la ley 1.004 aprobada en diciembre de 2002 apareció como una forma de ofrecer un marco legal a las parejas homosexuales de la ciudad de Buenos Aires, el objetivo final de quienes continúan la lucha en el plano legal, es el de lograr no sólo la unión civil, sino también el matrimonio entre personas de ambos sexos a fin de que sus integrantes puedan adoptar, heredar y cobrar pensiones.
Según datos del Registro Civil porteño, en el año 2003 las uniones gay representaban un 73 por ciento, frente a un 27 por ciento de parejas heterosexuales. Esta tendencia comenzó a revertirse y en 2007 las parejas de varón y mujer llegan al 79 por ciento. También aumentó la cantidad de uniones en forma significativa: entre 2004 y 2007 hubo incrementos de hasta 400 por ciento (según el mes).
Buenos Aires fue el primer distrito latinoamericano en tener unión civil. Luego se sumaron Carlos Paz y Río Negro que aún carecen de reglamentación. Santa Fe, Chaco, Córdoba, Mendoza y Corrientes también hay proyectos similares presentados.
A fines de 2007, la ex senadora Vilma Ibarra presentó un proyecto de casamiento homosexual –el primero que llegó a la Cámara alta– que busca darle a las parejas gay derechos como pensión, herencia, alimentos, adopción y obra social. La iniciativa aguarda tratamiento en la Comisión de Justicia y Asuntos Penales, mientras que en la Cámara baja también espera otro proyecto similar redactado por el diputado Di Pollina, que ya fue firmado por 21 legisladores.
La unión civil en el mundo
En Noruega, Suecia, Alemania, Islandia, Inglaterra, Dinamarca y Países Bajos ya existen uniones civiles y Bélgica es uno de los pocos países que tienen matrimonio homosexual, aunque nunca tuvo uniones civiles. Francia cuenta con un Pacto de Solidaridad, pero no es algo específico para parejas. España permite los casamientos homosexuales desde 2005. También se suman a la lista Canadá, donde se permite el matrimonio, y nueve estados norteamericanos que cuentan con uniones civiles.
En América latina, hay uniones en la ciudad de México, y a fines de 2007 la unión civil se aprobó en Uruguay. Colombia, Chile y Brasil están comenzando a debatir la cuestión.