Fue mientras Franco daba una entrevista radial por los controles realizados en "la previa" de los estudiantes.
Un estudiante que no pudo ser identificado porque tenía paraguas, pasó por detrás del titular de la GUM y disimuladamente le dejó la pintura en el saco.
En contacto con Radio 2, Gustavo Franco consideró el hecho como "una anécdota", pero sostuvo que preocupa que la pintura "estaba destinada al mobiliario urbano".
En ese marco, pidió a los padres y autoridades escolares que se hagan cargo de su responsabilidad.