En una entrevista que concedió al diario El Ciudadano, Echenique Robba, contó que se fue de Rosario con sus padres hace 22 años por la enfermedad que lo mantiene en una silla de ruedas. El joven padece de atrofia muscular espinal, una enfermedad genética que debilita sus músculos y le impide moverse.
Sin embargo, eso no lo detuvo cuando decidió involucrarse en política, sacudido por la crisis que atravesaba Europa.
"Hemos aprendido mucho del 15 M (el 15 de mayo 2011 se desató la protesta de los Indignados en Puerta del Sol). En ese momento la sociedad española despertó políticamente. En la Argentina, como está permanentemente en crisis, su gente ya tiene incorporada en sus conversaciones cotidianas las palabras inflación, Fondo Monetario, desempleo; en España, nadie hablaba de eso hasta que apareció el 15 M. Hoy una tertulia en un bar es más parecida a una tertulia en un bar argentino”, explicó el ahora eurodiputado que anticipó que recortará su sueldo, porque “le parece una barbaridad” y tratará de llevar al Parlamento “la voz de las personas con discapacidad, porque es una voz que cuesta mucho oír”.
“Un eurodiputado cobra un sueldo de 8 mil euros, una barbaridad. Eso no lo cobra el mejor cirujano de España. Pensamos que ese monto es un insulto para la gente que nos ha votado, por eso firmamos un compromiso de cobrar la cuarta parte, unos 1.900 euros, que es un sueldo normal, digno”.
Con todo, Echenique Robba, aseguró que extraña los “adoquines de su calle, el parque Urquiza y a Newell’s”.