En efecto, mientras que en 2007 se celebraron en el Registro Civil de Rosario 3.092 matrimonios, esa cifra ascendió hasta 4.011 en 2008, es decir casi 30 por ciento más que el año anterior.
Las estadísticas de Rosario, muestran una realidad diferente a la constatada en otras ciudades como Santa Fe, Buenos Aires y Córdoba, donde, en el mismo período, los casamientos disminuyeron y, como contrapartida aumentaron los divorcios.
Según datos aportados por las autoridades del Registro Civil, el fenómeno responde a la voluntad de muchas parejas jóvenes que estaban unidas de hecho, pero al cabo de un tiempo y quizás ante la llegada de los hijos, decidieron formalizar su convivencia con el matrimonio civil.