El Senado bonaerense aprobó este miércoles una reforma impositiva impulsada por el gobierno de Daniel Scioli que mejorará la recaudación en la provincia.

El denominado impuestazo consiguió el respaldo de 28 senadores, por sobre 12 votos negativos de la oposición, y dos abstenciones de Unión-Pro.

Los senadores oficialistas respaldaron los dichos del gobierno, y defendieron la iniciativa con argumentos similares, al hablar de fortalecer la "progresividad" y la "equidad" en el sistema fiscal. Además, enfatizaron en la necesidad de los fondos ante el creciente déficit de la provincia.

La ley fija la creación de un gravamen para la carga y descarga en los puertos de la jurisdicción, un impuesto a la herencia y ajustes en el Inmobiliario Rural y Urbano.

El proyecto contempla una actualización de las valuaciones de las propiedades rurales que impactará en un incremento promedio del 30% en el impuesto que pagan los dueños de campos.

En tanto, las casas ubicadas en sectores urbanos y valuadas por encima de los 150 mil pesos pagarían hasta un 20% más.