En el barrio La Cerámica, de la zona norte rosarina, los ojos de los vecinos brillan de orgullo. Fue el gol de “Angelito”, uno de los suyos, el que logró que Argentina se quedara en Brasil este martes. Desde la escuela “El Buen Samaritano”, donde Ángel Di María cursó la primaria, le mandaron sus felicitaciones a través de las pantallas de El Tres. Y de yapa, un deseo: “Que vuelva a Central”.

Consultadas por el periodista Pedro Levy de De 12 a 14, las maestras que lo tuvieron de alumno lo recordaron como un nene “muy, muy bueno y sano”. Aseguraron que aún hoy mantienen el vínculo y que cada vez que lo cruzan en el barrio, se funden en un abrazo, como si siguiera siendo un chiquito.