El bebé siamés nacido el jueves pasado en Granadero Baigorria y que sobrevivió a la operación que buscaba separarlo de su hermano, que falleció en el marco de esa cirugía, continúa internado en el hospital Eva Perón de esa localidad. Los médicos adelantaron que tras la delicada intervención es clave la evolución que se registre en las primeras 48 horas, por lo que lógicamente existe expectativa en relación a su estado.
Por su parte, el ministro de Salud de la provincia Miguel Cappiello visitó en la tarde de ayer el hospital para expresarle su apoyo a Patricia Pinto de Lodi, mamá de los siameses. “Vine a ponerme a disposición de la mamá, lo que necesite y podamos hacer lo vamos a hacer. Le dije a los médicos que todo lo que el bebé necesite, y se disponga en otros hospitales, lo va a tener”, señaló el funcionario.
El ministro explicó que “el bebé que sobrevivió, al que pudimos ver, está bien y estable, pero todavía en estado crítico porque es una cirugía de muy alta complejidad. El bebé ha mejorado, según la palabra de los especialistas, pero se necesita por lo menos 48 horas más para saber como va a ser su evolución”.
Los siameses nacieron el jueves a las 8.45, en una cesárea realizada a la mamá a los ocho meses de gestación. Estaban unidos por el abdomen y compartían órganos vitales. El diagnóstico de uno de los bebés, que además tenía malformaciones, era delicado desde su nacimento. Ese bebé fue el que no sobrevivió a la operación en la que médicos del Eva Perón intentaron separar a los gemelos.
La jefa de la sala de Neonatología del Hospital Eva Perón, Liliana Ramírez, fue quien confirmó este viernes a la mañana, tras la complicada operación, que uno de los chiquitos había fallecido. El otro bebé salió bien de la operación, aunque lógicamente es necesario esperar a ver cómo evoluciona en el posoperatorio.
"Hubo que operar sí o sí. Hubiéramos quizás esperado una estabilidad mayor (de los bebés) pero no se pudo lograr justamente porque el segundo bebé tenía otras patologías asociadas y complicaba al de mejor pronóstico", aclaró la profesional.
Ramírez destacó, sin embargo, que la operación resultó "muy favorable" para el bebé que sobrevivió. "La cirugía no tuvo inconvenientes para este bebé", explicó. "Pero fue sometido a gran estrés. Más alla de soportar las condiciones de su hermano, soportó el estrés quirúrgico a menos de 24 horas de haber nacido. Y eran bebes prematuros", recordó.