El presidente francés Nicolas Sarkozy decidió "posicionar" en Guyana "un avión equipado médicamente", "listo para intervenir en cualquier momento" para dar "atención apropiada" a la rehén Ingrid Betancourt si es liberada por la guerrilla colombiana de las Farc.

"Las informaciones sobre el estado de salud de Ingrid Betancourt y las declaraciones sobre posibles negociaciones para su liberación han llevado al presidente de la República a decidir, por precaución y para que pueda recibir enseguida atención apropiada y ser enviada lo antes posible a un centro hospitalario si es liberada, posicionar un avión equipado médicamente en Guyana, dispuesto a intervenir en cualquier momento", indicó el servicio de prensa del Elíseo.

Un avión militar francés, un Falcon 900, aterrizó el sábado en el aeropuerto internacional Rochambeau en Matoury, cerca de Cayena, antes de colocarse en la base militar contigua al aeropuerto, precisó una fuente aeroportuaria.

La angustia de los allegados Betancourt, que desde 2002 está en manos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, se incrementó ayer cuando se conocieron noticias alarmantes sobre el estado de salud de la rehén y los esfuerzos para hacerla liberar.

Betancourt, de 46 años y nacionalidad francesa y colombiana, lleva seis años como rehén de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc). Según las últimas noticias, se encuentra extremadamente débil. Su ex marido Fabrice Delloye manifestó en París su temor de que pudiera estar muerta y se preguntó si el gobierno colombiano oculta información.

Las Farc manifestaron en el pasado que están dispuestas a canjear a unos 40 rehenes -entre ellos Betancourt, tres políticos más, tres estadounidenses y varios militares y policías- por al menos 500 guerrilleros presos, incluidos dos que fueron extraditados a Estados Unidos.

Ante las noticias sobre el mal estado de salud de la líder política, el gobierno colombiano expidió un decreto para facilitar un eventual acuerdo con la guerrilla de las Farc para el canje de rehenes por rebeldes presos, como una medida de carácter urgente.