Javier Di Napoli
El encuentro a beneficio de las estrellas del fútbol en el Coloso del Parque fue, como se esperaba, una fiesta mayormente leprosa pero eso no impidió que el total de los presentes pudiera disfrutar de una noche inolvidable, independientemente de los colores de cada uno. A Lionel Messi, Maxi Rodríguez, Javier Zanetti y otras tantas figuras de la redonda se les sumó la presencia de numerosas personalidades de otros ambientes que le dieron un color diferente a la jornada.
Como lamentablemente no ocurre cuando la Fundación Pupi, una de las gestoras del evento, lo organiza en Buenos Aires, el estadio de Newell’s lució repleto, con un público entre el que se vieron muchas más familias y cámaras de fotos que un partido común.
El presidente del club rojinegro, Guillermo Lorente, entregó antes del juego un presente a cada uno de los ex jugadores de la institución y a medidas que sus nombres sonaban en la voz del estadio fueron marcando el aplausómetro: Messi, Maxi y Larry Saldaña se destacaron del resto.
Y claro, la batuta en las tribunas fue tomada de entrada por la hinchada leprosa que siempre se ubica en la cabecera doble. En ese sector, el despliegue de banderas y el canto permanente definieron una postal sin diferencias con la de un partido oficial.
El resto de la gente se dedicó sobre a todo a disfrutar de las pinceladas que, en un partido con poco ritmo, las figuras que salieron a la cancha brindaban cada tanto.
Y en los 60 minutos (se jugaron dos tiempos de 30) los aplausos se repartieron entre otros ex leprosos, como Germán Real, el Negro Zamora o Gustavo Dezzotti, que dejó por un rato el cargo de manager del club y demostró que todavía está para jugar, al menos estos amistosos.
Pero el estadio se vino abajo cuando la Pulga hizo su gol. La gran mayoría iba a verlo a él. El rosarino aguantó en cancha hasta poder marcar y luego se retiró. Fue en medio de una ovación y con la sensación del deber cumplido tras haber vuelto al Coloso, regalar un poco de su magia con un tanto incluido y participar como la figura más convocante de un evento solidario.
Párrafo aparte para Pablo Granados, Pachu Peña e Hijitus, tres de los más conocidos hinchas de Newell’s que triunfan desde hace tiempo en la televisión de Buenos Aires. Los tres fueron ovacionados por la gente, que de paso se divirtió con la disparatada entrada en calor que hicieron en un arco en el entretiempo para ingresar en el complemento. Y también deleitaron con algunas intervenciones en el partido.
Los únicos castigados por el grueso de la gente –aunque siempre dentro del kolflore– fueron Ezequiel Lavezzi, confeso hincha de Central, y el árbitro Horacio Elizondo, a quien los simpatizantes del equipo del Parque no le perdonaron una actuación que consideraron favorable a Vélez en un partido por octavos de final de la Copa Libertadores 2006.
El gran ausente fue Marcelo Bielsa. El DT de la selección chilena no pudo asistir al Coloso –sí lo hizo su hermana, la concejala María Eugenia, aunque lejos del césped– pero la hinchada se acordó de él. Con las banderas alusivas que siempre cuelga en las tribunas y con canciones para recordarlo, el Loco también estuvo presente.
En ese marco, Rosario cumplió y disfrutó. Habrá que ver cómo responden los madrileños con esta noble causa que encaran los jugadores. Porque este partido entre “Amigos de Pupi” y “Amigos de Maxi” tendrá su revancha en la cancha del Atlético de la capital española. Pero ese ya será otra historia.
Fútbol, solidaridad, recuerdos y humor en una noche inolvidable
Como era de esperar, el público leproso tomó la fiesta como propia y dominó en las tribunas del partido solidario con Messi y compañía. Hubo reconocimiento a ex figuras y risas con personalidades del espectáculo. Todas las fotos