La Organización Mundial de la Salud elevó este miércoles el nivel de alerta pandémica por la gripe porcina al grado 5, de una escala de 6, ante la imparable expansión del virus.
El anuncio lo hizo la directora general de la OMS, Margaret Chan, después de haber presidido una reunión telefónica con los expertos del comité de emergencia de la organización.
"Toda la humanidad está bajo la amenaza de una pandemia", dijo Chan, quien hizo un llamamiento a gobiernos, industrias farmacéuticas y la comunidad de negocios para una sus esfuerzos y recursos en afrontar esta crisis.
Según el manual de fases de alerta, el grado 5 se declara cuando existe transmisión del virus de persona a persona en al menos dos países.
Gripe porcina: elevaron a 5 el nivel de alerta por "inminente pandemia"
La Organización Mundial de la Salud tomó la medida por la "imparable expansión del virus de la influenza". El organismo internacional pidió a gobiernos, industrias farmacéuticas y la comunidad de negocios, recursos para afrontar la crisis. Advierten que el panorama podría ser devastador y grave en los países en desarrollo
La responsable de la OMS recordó que "los virus de la gripe son conocidos por ser impredecibles" y dijo que una pandemia con el actual virus puede ser con la enfermedad "desde leve hasta muy severa".
Chan también señaló que una pandemia será mucho más devastadora y grave en los países en desarrollo y con menos recursos.
Recomendaciones
Según la guía que la OMS distribuyó entre sus estados miembros esta decisión implica que debe pasarse de la fase de preparación a la de las acciones tanto para aquellos países que ya tengan casos confirmados de enfermos, como aquellos que aún no los hayan contabilizado.
A nivel de Estado, una de las principales acciones es decidir si es necesario declarar una emergencia nacional y en que nivel.
Una vez puesto en marcha el comité de emergencia de cada país, lo principal es tener bien abastecida la red de distribución de medicamentos o tratamientos disponibles.
Ello implica tener a punto la vacuna -de existir- y aplicar una vasta campaña de vacunación; contar con suficientes antivirales; y espacio disponible en los hospitales.
Asimismo, los países deben evaluar de forma completa si necesitan ayuda externa, y solicitarla si fuera necesario, en aras no sólo de ayudar a la propia población, sino de evitar que la pandemia se extienda a los países vecinos.
A nivel de laboratorio, también es importante que se compruebe si ha habido cambios genéticos en los virus en base de las muestras de los pacientes infectados.
E, incluso, la guía de la OMS recuerda que el país debería contar con capacidad suficiente para enterrar a los muertos.
De cara a la ciudadanía, el país debería lograr que se minimicen los niveles de interacción fuera del hogar, y sobretodo, conseguir que en caso de signos de gripe, la persona se aisle lo más rápido posible.
Para lograrlo, la guía sugiere que las clases deberían suspenderse y los horarios de trabajo deberían ajustarse o modificarse.
Asimismo, podría impulsarse la cancelación o reducción extraordinaria de la frecuencia y número de transportes públicos disponibles.
Los países que aún no estén afectados por la pandemia necesitan igualmente activar un comité de crisis que esté preparado para distribuir las vacunas y aplicar las medidas necesarias para contenerla.
La agencia recomienda que la comunicación de los gobernantes con la población sea lo más clara, efectiva y actualizada posible.
La agencia de la ONU reconoce la libertad de cada país para tomar las decisiones que considere oportunas.
Pero específicamente no recomienda el cierre de las fronteras para las personas y mercancías; las desinfecciones generalizadas; el uso de máscaras para las personas que estén sanas; la restricción de viajes en el interior del país a no ser que la zona de infección esté muy delimitada.
Fuente: EFE