El primer programa que remotamente se asemeja a un videojuego moderno fue presentado un día como hoy, pero medio siglo atrás, en el Laboratorio Nacional de Brookhaven, en Upton, Nueva York.

Se llamó “Tennis para dos” y usaba un circuito analógico que mostraba una minimalista cancha de tennis y la trayectoria de una pelotita en un osciloscopio (un instrumento de medición electrónico, usado para la representación gráfica de señales eléctricas), según consigna la revista ScienceNews.

Con este aparato, dos jugadores podían moverse hacia atrás y adelante con el objetivo de pasar la pelotita para el otro lado. Sin embargo, la máquina no contaba los tantos.

Aquellos que visiten el laboratorio de Brookhaven el 24 de octubre, jornada en que se abrirá al público, podrán utilizar una réplica del juego y sentirse, literalmente, en los años ’50.