El transporte y la educación eran los sectores más afectados por la huelga general, la segunda en menos de dos meses, que vive Francia, escenario de más de 200 manifestaciones contra las medidas del gobierno para afrontar la crisis.

El primer ministro, François Fillon, ha aplazado su viaje a Bruselas, donde tenía previsto participar hoy en la apertura de la cumbre de jefes de Estado o de Gobierno de la Unión Europea (UE), para dar su primera respuesta a la movilización social ante las cámaras de televisión esta misma noche, a partir de las ocho (19.00 GMT).

No obstante, Fillon ya advirtió recientemente que, para no aumentar aún más el déficit público, no habrá ninguna partida presupuestaria suplementaria para nuevas medidas sociales como la que se anunció tras la huelga de enero.

Los sindicatos franceses esperan superar el seguimiento del paro del 29 de enero, cuando salieron a la calle 2,5 millones de personas, según las centrales convocantes, y 1 millón, según la policía.