Los docentes de la facultad de Humanidades y Artes, que abrió sus puertas este martes tras permanecer cerrada durante una semana debido a un conflicto desatado entre las autoridades de la casa de estudio y un grupo de alumnos por la contratación de seguridad privada, decidieron que darán clase toda la semana y además reprogramarán los exámenes suspendidos.
Humanidades: hay clases hasta el viernes y reprograman exámenes
Tras una semana cerrada, la facultad reabrió este martes. Los docentes definieron retomar sus actividades pero aclararon que la decisión "se mantendrá en la medida en que se efectivice el cumplimiento de la resolución" que establece que haya vigilancia privada
En una asamblea realizada este martes al mediodía, los profesores resolvieron (por 150 votos y 2 abstenciones) retomar hasta este viernes 30 de mayo las actividades académicas y tomar, a partir del 2 de junio, los examenes que habían sido suspendidos.
"Esta decisión, se mantendrá en la medida en que se efectivice el cumplimiento de la resolución 047/2008 del Consejo Directivo", sostuvieron, en alusión a la decisión de que agentes de seguridad privada custodien la facultad. "Esta iniciativa del claustro docente se inscribe en la solicitud del Consejo Superior y el llamado del Decano a la apertura de un espacio de diálogo con los distintos sectores que forman parte de la comunidad de nuestra Facultad", aclararon en la resolución firmada tras la asamblea.
El clima previo, caliente
“No podemos exponer a la gente a que sea violentada”, casi gritó Daniel Randisi, vicedecano de la facultad, en la previa a la reunión. “Ya estamos en una instancia en la que no se discute esto porque es una resolución del Consejo Directivo”, siguió en referencia a la incorporación de agentes de seguridad privada en la casa de estudios. “No podemos ser cómplices y que el gobierno de esta facultad sea violentado. No volveremos a ser extorsionados”, bramó en directa alusión a los estudiantes que se oponen a esta medida.
Una hora antes de que empezara la reunión, el clima era más pacífico. Lisandro Citta, el presidente del Centro de Estudiantes que se opuso a la resolución del Consejo Directivo, confirmó en Radio 2 su participación en el encuentro: “Estamos de acuerdo con que se reabran las puertas y se llame a una reunión para consensuar cómo salir de este tema, para resolver los problemas de inseguridad y los otros, el estado de los baños, la falta de libros y de becas” indicó y agregó: “La situación se puede resolver entre todos”.
El conflicto en Humanidades comenzó hace tres semanas atrás, cuando el consejo directivo de esa facultad decidió contratar vigilancia privada para controlar el edificio de Entre Ríos al 700. La iniciativa fue rechazada por un grupo de alumnos de izquierda, que echó a los agentes. Esta acción provocó que docentes y no docentes decidieran no asistir a la facultad ni dar clases debido a la falta de seguridad que, señalan, existe en el lugar.